AUTOR: COLLINS, Wilkie
EDITORIAL: Debolsillo
Novela
de intriga en la que los tortuosos manejos de un lord arruinado para
apoderarse de la herencia de su mujer se mezclan con el secreto de su
pasado y la aparición misteriosa de una joven: " La dama de blanco".
La obra es un ejemplo clásico de la novelística inglesa del siglo XIX. En ella se mezclan el cuadro de costumbres en un marco aristocrático y refinado, la trama sentimental y la tensión dramática provocada por la turbia conducta de dos personajes sin escrúpulos.
La acción puede resultar demasiado lenta y el estilo, quizás, ampuloso, un tanto alejado de los gustos actuales, pero la habilidad narrativa del autor y lo sugestivo de la ambientación conservan todavía su atractivo y efectividad. El planteamiento argumental encierra suficiente variedad y atractivo como para que el lector se sienta atraído por los múltiples elementos que combina la acción.
Los protagonistas viven, paralelamente, una historia amorosa y una intriga en que intervienen motivaciones económicas y espionaje. Las dos ponen a prueba la rectitud de su conducta y la firmeza de sus principios, pero en ambos casos actúan de forma totalmente correcta.
El autor no se deja llevar por una moral convencional y de apariencias, sino que sus personajes se mueven con honestidad. Como réplica, los implicados en acciones reprobables pagan con la vida las consecuencias de su maldad.
Wilkie Collins (Londres, 1820-1889), autor también de otra conocida novela de intriga titulada La piedra lunar, ha sido considerado por estas obras un precursor del género policíaco. Con una obra fecunda que abarca el ensayo, teatro y narrativa, alcanzó en vida notable éxito. Sus obras se siguen reeditando con buena acogida por parte de los lectores.
La obra es un ejemplo clásico de la novelística inglesa del siglo XIX. En ella se mezclan el cuadro de costumbres en un marco aristocrático y refinado, la trama sentimental y la tensión dramática provocada por la turbia conducta de dos personajes sin escrúpulos.
La acción puede resultar demasiado lenta y el estilo, quizás, ampuloso, un tanto alejado de los gustos actuales, pero la habilidad narrativa del autor y lo sugestivo de la ambientación conservan todavía su atractivo y efectividad. El planteamiento argumental encierra suficiente variedad y atractivo como para que el lector se sienta atraído por los múltiples elementos que combina la acción.
Los protagonistas viven, paralelamente, una historia amorosa y una intriga en que intervienen motivaciones económicas y espionaje. Las dos ponen a prueba la rectitud de su conducta y la firmeza de sus principios, pero en ambos casos actúan de forma totalmente correcta.
El autor no se deja llevar por una moral convencional y de apariencias, sino que sus personajes se mueven con honestidad. Como réplica, los implicados en acciones reprobables pagan con la vida las consecuencias de su maldad.
Wilkie Collins (Londres, 1820-1889), autor también de otra conocida novela de intriga titulada La piedra lunar, ha sido considerado por estas obras un precursor del género policíaco. Con una obra fecunda que abarca el ensayo, teatro y narrativa, alcanzó en vida notable éxito. Sus obras se siguen reeditando con buena acogida por parte de los lectores.
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