AUTOR: CUEVA, Juan de la |
EDITORIALES: Espasa Calpe, Anaya |
En el camino hacia la
configuración definitiva del teatro nacional español ocupa Juan de la Cueva un lugar
destacado, haciendo confluir la tradición clásica del Renacimiento con la
popular. Si en El infamador anticipa temas y formas que
vamos a encontrar en el teatro barroco y logra construir la figura de un rico
necio y fanfarrón que imagina que el dinero va a rendir a sus pies las
voluntades ajenas, en la tragedia de Los siete infantes de Lara hace
revivir en la escena uno de los más conocido temas nacionales. Una emoción
extraña y nunca sentida en el teatro dice Menéndez Pidal debió de apoderarse de
todos los espectadores. Eran los mismos versos del romance que todos sabían y
recitaban desde tiempo inmemorial y que, repetidos ahora, anunciaban una nueva
fuente de vida para el teatro cuyo manantial comenzaba a gotear antes de
desatarse en copiosos raudales.
En cuanto al “Ejemplar poético” sólo decir que
es una de las últimas obras de Cueva
en la que compara las formas de hacer
teatro de los clásicos, griegos y
romanos, con los modernos, sus
contemporáneos, sobre todo españoles.
Nº DE REGISTRO: 19034, 20193 |
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